El modelo de madurez de Connected Enterprise de Rockwell Automation integra la tecnología de la información (TI) con la tecnología de las operaciones (TO) para mejorar el funcionamiento y minimizar los riesgos. Pero ¿cómo sabrá si está teniendo éxito o si está quedando rezagado?
La mayoría de los altos ejecutivos usan tableros para revisar qué resultados obtuvo (tiempo pasado) la empresa, observando indicadores retrospectivos, tales como ingresos, costos y ganancias. Desafortunadamente, mirar por el espejo retrovisor no ayuda al conducir hacia delante, ya sea en una autopista o con las etapas del modelo de madurez. Para navegar hacia la mejora, necesitará indicadores y parámetros nuevos y mejores.
En Rockwell Automation, los parámetros continúan evolucionando. Tenemos sugerencias para ayudarlo a empezar, pero también será necesario explorar los parámetros sobre la naturaleza única de sus operaciones, lo que lo ayuda a realizar el seguimiento del funcionamiento a medida que su empresa avanza por los cinco pasos del modelo de madurez.
En la etapa 1 (Evaluación), los fabricantes verifican la disposición para cambiar procesos y arquitecturas de información. En la etapa 2 (Redes y controles seguros y actualizados), realizan cambios para aprovechar información más precisa y oportuna entre TO y TI. Los mejores parámetros para estas etapas indican que los procesos son estables y están mejorando; usted intenta crear un entorno de producción que responda rápidamente a problemas con el equipo, los procesos y los flujos de trabajo. Los parámetros típicos incluyen:
- duración del ciclo de fabricación;
- tiempos de transición;
- calidad (desechos, reelaboración, rendimiento);
- salud y seguridad medioambiental (lesiones, accidentes, liberaciones de químicos);
- costos de producción (mano de obra, energía, materiales);
- accesos no autorizados/brechas de seguridad de red; y
- porcentaje de dispositivos de planta (TO) integrados con la empresa (TI); es decir, acceso mutuo a sistemas y controles.
En la etapa 3 (Capital circulante de datos definidos y organizados) y en la etapa 4 (Análisis) se requieren nuevos parámetros para garantizar que el funcionamiento de las instalaciones contribuya a alcanzar mejores parámetros financieros corporativos. Los parámetros de uso más frecuente incluyen:
- retorno de los activos;
- rotación de inventario;
- productividad;
- funcionamiento a tiempo de las introducciones de nuevos productos;
- satisfacción del cliente (rechazos, costos de garantía de devoluciones);
- eficacia total del equipo;
- control de capital; y
- costos de fabricación.
La etapa final para crear una Connected Enterprise (Colaboración) extiende los cambios de TO/TI a clientes y socios de la cadena de suministro. Los parámetros deben demostrar una mejora en las relaciones con clientes y proveedores (p. ej., cronogramas de producción y pronósticos estrechamente conectados) y en el tiempo de reacción a inconvenientes externos (interrupciones de proveedores, pronósticos del mercado, tendencias comerciales, eventos políticos). Los parámetros clave incluyen:
- exactitud del pronóstico de demanda;
- innovación de productos (patentes);
- porcentajes de ingresos de nuevos productos;
- costos de desarrollo de nuevos productos;
- cuota del mercado;
- costos de logística/transporte (porcentaje de ventas); e
- inventarios generales de las cadenas de suministro.
El modelo de madurez de Connected Enterprise de Rockwell Automation permite obtener mejoras significativas en el funcionamiento y el resultado final, pero puede requerir muchos años para la implementación total. Mantenga a su empresa en el camino correcto a lo largo de las cinco etapas, mediante el monitoreo de los parámetros correctos en el momento adecuado, a fin de disfrutar de los resultados apropiados.
Publicado 9 de febrero de 2015