En muchas plantas de fabricación la norma continua siendo apagar fuegos, es decir, solucionar sobre la marcha emergencias imprevistas en la maquinaria, sin datos para desarrollar soluciones a largo plazo.
Estas soluciones de contingencia pueden parecer necesarias en ese momento, pero si se prolongan en el tiempo reducen la productividad, la rentabilidad y afectan a la moral de los trabajadores.
No obstante, gracias al Internet Industrial de las Cosas (IIoT) y a las mejoras en equipos de comunicación, en líneas de producción y en gestión corporativa, la mayoría de estas reparaciones imprevistas serán pronto una reliquia del pasado.
¿El motivo? Que las herramientas de colaboración y visualización habilitadas para el IIoT pueden capturar información de las máquinas y de los dispositivos incorporados en las mismas y utilizarlos para alimentar análisis en tiempo real. Estos análisis, a su vez, ayudan a evitar problemas en la producción, como, por ejemplo, roturas de equipos, escasez de inventario, productos de calidad más baja de lo normal o condiciones inseguras de trabajo. Además, de este modo los empleados cuentan con diagnósticos en tiempo real que les permiten solucionar los problemas antes de su aparición y tomar mejores decisiones, ayudando así a reducir el despilfarro y a impulsar la productividad.
En pocas palabras, los datos se convierten en inteligencia práctica.
Pero eso no es todo, los dispositivos inteligentes incorporados a las máquinas y la conexión mediante EtherNet/IP™ a controles y sensores remotos pueden ayudar a digitalizar las iniciativas de mejora continua, como las que implementan los métodos lean o seis sigma. De este modo, los propios trabajadores pueden hacer el seguimiento de las métricas de equipamiento y de producción en tiempo real y así planificar e implementar mejoras de forma más rápida y rentable.
Por desgracia, para muchos fabricantes y operadores industriales, la evolución hacia una Connected Enterprise puede implicar retos significativos:
- A menudo, los controles y sensores anticuados no pueden extraer y comunicar datos, aparte de constituir un riesgo de seguridad
- Su infraestructura de red no suele ser adecuada para transferencias de datos desde el departamento de operaciones al resto de la empresa
- Las soluciones antiguas de análisis limitan la utilidad de la información, tanto para los trabajadores como para los directivos
- La falta de una planificación estratégica para la digitalización estanca la transformación de toda la organización
En todas las fábricas hay oportunidades digitales. ¿Estás listo para encontrar las tuyas?