Reducir los costos, minimizar las perdidas, aumentar el rendimiento, cumplir con un marco normativo en continuo crecimiento y mantener una política estricta de cero lesiones se pueden alcanzar mediante el uso adecuado de tecnología.
José Beas, gerente de industria minera para Latinoamérica de Rockwell Automation, señala que actualmente las grandes compañías mineras están apostando por intensificar las iniciativas de innovación y uso de tecnología con el fin de mejorar la eficiencia operacional.
En la actualidad, según Beas, los datos de todo el proceso de producción se encontraban confinados a los activos dispersos a través de todas las operaciones mineras debido a diferentes tecnologías de automatización y sistemas obsoletos, con la consecuente incapacidad de generar información útil y accionable.
Gracias a la habilitación de plataformas tecnológicas robustas que integran tecnologías disruptivas como inteligencia artificial, machine learning, realidad aumentada y análisis avanzado de datos, es posible cubrir aspectos operacionales importantes y detectar dependencias e interdependencias que se pierden cuando la información reside en silos.
Rockwell Automation realizó un sondeo entre los principales ejecutivos de minería del mundo, a quienes se les preguntó cuáles eran las principales prioridades para la transformación digital y las respuestas recibidas se centraron en:
(1) Aumentar la eficiencia operativa, (2) Mejorar OEE (Índice que mide la eficiencia promedio de un activo, (3) Disminuir el uso de energía para mejorar la sostenibilidad y reducir los costos (4) Mejorar la salud y seguridad ambiental y (5) Lograr la integración de la cadena de suministro.
Sobre esta base, Beas señala que Rockwell Automation cuenta con una gran capacidad para respaldar a las compañías en el camino hacia el logro de una mina conectada por los siguientes motivos: experiencia en minería, informática y automatización, liderazgo tecnológico en control de procesos y análisis avanzado, red de socios a nivel global, regional y local.